Esta leyenda cuenta, que sobre estos mares, navega un barco, pero no un simple barco. Esta tripulado por unas personas que no tienen cabida en la sociedad. Ese barco, estaba tripulado por el mejor pirata de la historia Fermes Stone, el cual todo el mundo temía en los mares...y...
Jack! cuantas veces te he dicho que no quiero que leas esos libros, no leras mas historias de piratas no existen! dijo gritando mientras cerraba la puerta de un portazo.
Os preguntareis, ¿quien soy yo? Soy un pequeño marinero, que se gana la vida en un pequeño puerto en diminuto lugar llamado Sarlar. Mi nombre es Jack, siempre me ha fascinado las historias de piratas, los tesoros y sus aventuras son fascinantes ¿no es así?. Mi madre no quiere que lea estas historias porque mi padre fue pirata.. quizás por eso yo también quiera serlo. Creo que ya es hora de irse a la cama, quédense conmigo y sigan escribiendo paginas conmigo.
A la mañana siguiente al alba, los barcos entraban a los puertos y Jack se despertó, poco después su madre Sofia entro en su cuarto.
Sofia: Jack vamos deja de hacer el vago, tienes que ayudarme con el trabajo.
Jack: Bostezaba mientras se levantaba de la cama diciendo voy...
Jack se levanto con legañas en los ojos mientras se vestía y salia hacia el salón.
Tomaros Sofia y Jack un desayuno rápido y fueron al puerto a por provisiones, ya que misteriosamente, no llegaba mucho en los barcos mercaderes, algo o alguien dañaba los barcos y los que llegaban se caían a pedazos, así que era primordial estar en el puerto temprano para coger lo mejor.
Esa vez que salí de casa no me pude imaginar como cambiaría mi historia para siempre, ahora empieza la historia.
Llegaron al puerto y como era habitual habían pocas provisiones, Jack fue corriendo hacia el barco que estaba atracado en el puerto y ver el destrozo que llevaba. Lo miraba fijamente, un marinero del barco que bajaba de el, se acerco a Jack.
Marinero: Perdón chico, ¿Viste algo en el barco?
Jack: Solo veía el destrozo, debió ser una dura travesía.
Marinero: Si lo fue casi no lo contamos, otro barco intervino, pero al menos pudimos llegar a puerto.
Jack: ¿No serian piratas lo que os atacaron?
Marinero: Dijo en voz alta con tono sarcástico, ¿Piratas? ¿Piratas? anda chico no creas en esas cosas decía mientras reía. De repente se acerco a la oreja de Jack y dijo, si fueron piratas el temible Neptuno a las manos de Fermes Stone, no se lo cuentes a nadie mas.
Jack: De acuerdo dijo con voz baja.
Jack se quedo pensativo y sabiendo que todas las historias que había leído o le contaron sobre Fermes Stone eran terribles, fue un milagro que pudieran llegar.
Sofia: Jack!! ven aquí a ayudarme! grito Sofia a Jack
Jack: Voy!!
Así que cogieron unas pocas provisiones y se pusieron rumbo a casa. Al llegar, Jack dejo la parte que llevaba de la mercancía en la mesa y fue a su cuarto, aun estaba alucinado con que existieran aun los piratas.
Autor: David Navarro
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